Los mandamientos de la inversión… en tiempos de cólera
El mejor aliado de un inversionista es el tiempo: con los años, el dinero crece de manera exponencial. Pequeños sacrificios en la vida diaria se convierten a largo plazo en grandes beneficios en tu patrimonio.
Adina Chelminsky
(Primera de III partes)
Tiempos difíciles son problemáticos para los economistas. No por la variedad de análisis que tienen que hacer, sino porque vayan a donde vayan, a la hora que sea, la gente nos pregunta, cual consulta de doctor, dos cosas: la primera es: ¿debo invertir en la Bolsa?
La respuesta es SÍ. La Bolsa, los instrumentos de renta variable, han demostrado ser la opción de inversión más rentable, independientemente del periodo que se analice.
Peeeeero (y siempre hay un pero), toda inversión en instrumentos de renta variable tiene que ser sólo con dinero que se requiera en el largo plazo. El dinero para pagar el viaje del próximo mes no se debe de invertir en este tipo de instrumentos.
La segunda pregunta es: si conocemos alguna clave o secreto de inversión para asegurar o maximizar los rendimientos en Bolsa en estos tiempos de incertidumbre. Muchos asesores dicen que sí lo hay.
Yo estoy convencida de que no existe ningún secreto. Lo que sí hay son ciertos mandamientos para ser un buen inversionista.
Mandamientos que aplican sea cual sea la situación de los mercados. Obviamente, la coyuntura debe tomarse en cuenta cuando eliges ciertos instrumentos. Pero las reglas aquí planteadas trascienden cualquier movimiento del mercado o situación económica.
Hace unos meses hablamos de ellos en esta columna, pero los repito por la insistencia, muy justificada, de los lectores de saber qué hacer con el dinero en estos tiempos de cólera.
1. Invertirás según tu perfil. No todas las inversiones son para todas las personas; el mismo instrumento que puede ser ideal para un joven soltero y agresivo, puede convertirse en un peligro dentro del portafolio de un adulto mayor, retirado y conservador.
Toda estrategia de inversión debe estar hecha de acuerdo con tus características y necesidades particulares, o sea, a tu “perfil de inversionista”, el cual depende de:
Tu edad y condiciones. Mientras más joven seas, y más tiempo falte para tu retiro, mayores riesgos puedes asumir en las inversiones. Por el contrario, mientras más responsabilidades tengas, más conservadoras deben ser las decisiones.
Lo que piensas hacer con el dinero. No es lo mismo diseñar una estrategia para pagar la universidad de tus hijos (un gasto fundamental) que la que necesitas usar para un viaje.
Tu carácter. Hay personas que naturalmente toleran (es más, buscan) mayor volatilidad en sus inversiones a cambio de mejores posibilidades de rendimientos, mientras que otras prefieren tomar decisiones más mesuradas.
2. Empezarás lo antes posible. Una persona de 45 años que invierte en una cuenta de banco diez mil pesos, obtiene al momento de su retiro (20 años después) 46 mil 609 pesos… Un joven previsor que a los 25 años invierte esa misma cantidad de dinero, bajo las mismas condiciones, obtiene al retirarse (40 años después) ¡234 mil 624 pesos!
La lección de este ejemplo es simple: El mejor aliado de un inversionista es el tiempo; el paso de los años permite al dinero invertido crecer de manera exponencial; no dejes para mañana lo que puedes empezar a invertir hoy.
3.- Serás constante. Ahora, si el mismo joven del ejemplo anterior (el que empezó a ahorrar a los 25 años) además de previsor es constante y logra cada año invertir diez mil pesos, al momento de retirarse va a tener en su cuenta ¡tres millones 42 mil 435 pesos!
Otra lección evidente: cuanta mayor prioridad le des al ahorro y a la inversión a lo largo de tu vida, mejor —e incluso impresionantes— van a ser los resultados que obtengas. Pequeños ajustes o sacrificios en la vida diaria se acumulan, con el peso del tiempo, en grandes beneficios para tu patrimonio.
Los nueve mandamientos restantes continuarán en las próximas dos semanas.
*Especialistas en finanzas personales. Doktor Dinero
adina@doktordinero.com
www.doktordinero.com
@caymill
Elegir “un poco de todo” te permite, en el largo plazo, conseguir mayores ganancias y menores riesgos. La mejor manera de maximizar la ganancia de tus inversiones es reinvirtiendo las utilidades.
Adina Chelminsky
(Segunda de III partes)
Continuemos con los mandamientos del inversionista (los primeros tres los pueden consultar en www.excelsior.com.mx).
4. No pondrás todos los huevos en la misma canasta. El secreto más conocido, y muchas veces omitido, de los inversionistas exitosos es una palabra: diversificar. Esto significa repartir el dinero entre instrumentos financieros de diferentes características: un poco en acciones, un poco en bonos, un poco en largo plazo, un poco en corto, un poco en acciones de “valor”, otro poco en acciones de “crecimiento”, un poco en instrumentos en dólares…
Elegir “un poco de todo” te permite, en el largo plazo, conseguir mayores ganancias y menores riesgos, ya que en caso de que alguno de los instrumentos que elegiste tenga resultados desfavorables, podrás compensarlo con la buena evolución de otros.
La diversificación la debes hacer según tu perfil de inversionista y las condiciones económicas y financieras del momento, eligiendo entre instrumentos de diferentes mercados (acciones, renta fija, derivados, dólares, etcétera), de varios plazos (corto, mediano y largo) y de distintas características (un poco de acciones de empresas de telecomunicaciones, otro poco de empresas comerciales, por ejemplo). Mucho ojo, diversificar no implica pulverizar tu portafolio. No es cuestión de elegir decenas de productos diferentes nada más por tener diversidad, sino encontrar una combinación de instrumentos que se complementen entre sí. Es mejor elegir entre cinco o siete instrumentos que se optimicen mutuamente, que un portafolio de 25 inversiones diferentes que no tenga ni ton ni son.
5. Reinvertirás tus utilidades. La mejor manera de maximizar la ganancia de tus inversiones es reinvirtiendo las utilidades. Si tienes un bono u otro instrumento que te da ganancias periódicas (cupones, intereses, dividendos), no lo gastes; en vez, opta por reinvertir —ya sea en su totalidad o por lo menos en una parte— junto con el resto de tu dinero para, literalmente, poder obtener intereses de tus intereses.
Toma en cuenta este sorprendente ejemplo: Imagina que tienes un bono de diez mil pesos invertido a 20 años a una tasa de seis por ciento, por lo que anualmente recibes 600 pesos de interés.
Si gastas este dinero cada vez que te lo entregan al final del plazo, habrás gastado un total de 12 mil pesos (600 pesos por 20 años), pero si reinviertes estos intereses año con año, a la misma tasa de interés que el instrumento original, al fin del plazo contarás con 22 mil 87 pesos adicionales.
6. No olvidarás los centavos. Cuando decidas comprar o vender algún instrumento, fíjate muy bien en los pequeños gastos; en estos centavos se puede marcar la diferencia de lo que ganas: los costos de la transacción (que pueden variar según diferentes escenarios), las comisiones y/o los impuestos que te pueden generar.
7. Cambiarás según tu edad. No es lo mismo un inversionista exitoso que 20 años después. Más que cualquier otro factor, tu portafolio de inversión debe reflejar las necesidades propias de tu edad. El riesgo, y por ende el tipo de inversiones, que puede asumir un joven soltero de 30 años, que tiene 30 o 35 años de ingresos por delante, no es el mismo que el de un adulto de 60 que esté a pocos años de retirarse. Existen diversas fórmulas para definir, según tu edad y tu perfil de inversionista, cuál es el porcentaje de tu dinero que debe estar invertido en instrumentos de renta fija (como bonos o fondos de inversión de deuda), y el porcentaje que debe invertirse en renta variable (acciones, fondos de inversión de renta variable e instrumentos especulativos).
Independientemente de si quieres seguir al pie de la letra esos parámetros, es un hecho que tus inversiones deben de volverse más conservadoras con el paso
de los años.
Los cinco mandamientos restantes continuarán la próxima semana.
*Especialistas en finanzas personales. Doktor Dinero
adina@doktordinero.com
www.doktordinero.com
@CAyMILL
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