23 de Abril 2014
«¿Qué hago con esto?», «no conozco los cassettes» ó «creo que es un poco extraño» son algunos de los comentarios de los menores
Hay una generación de niños que se ha criado con los «smartphones», las tabletas, los ordenadores portátiles y el iPod. Un canal de Youtube, «TheFineBros» ha creado la serie «Kids React», en la que enfrentan a niños no mayores de 13 años a temas diversos, como el matrimonio gay. Pero no sólo «reaccionan» ante conflictos sino ante gadgets tecnológicos que en su perspectiva son instrumentos arcaicos.
En este episodio le muestran un «walkman», el mítico reproductor de cassettes portátil que lanzó Sony en Japón en 1979 y que se extendió por el resto del mundo en la década de los 80 y 90.
Los niños de entre 6 y 13 años (señalan que algunos adolescentes seguirán participando en el programa como niños hasta que entren en el Instituto) mostraron sorpresa y confusión cuando el equipo de producción les hizo entrega de un «Walkman».
TheFineBros le pregunta sobre el artefacto en una batería de preguntas, que implica si saben su nombre, o para qué sirve. Las respuestas son propias de niños criados en una era digital.
«Oh, un teléfono, no ¿qué es esta cosa?», pregunta una de las participantes. «Tengo que apretar el "play"», intenta otro. «No tengo idea de qué es», dice Cooper de seis años.
«¿Sabes para qué se usa?», le preguntan. «Como walkie talkies», «para hablar», responden de forma incorrecta algunos, hasta que otros se acercan. «Para escuchar música», dice una, y su compañera acierta: «Un momento, ¿es una reproductor de cassettes, no?».
Algunos de los niños no lo pueden creer. «¿Esto? No puede ser», «Debes estar bromeando», dicen. Otros, curiosos, tratan de averiguar cómo funcionan el Walkman.
El equipo del programa les explica un poco su funcionamiento, en qué consiste, les presenta un cassette y los auriculares con los que solían venir acompañados. Una de las chicas espeta cuando recibe los «cascos»: «Oh, mi abuelo tiene unos así». Otro chico, de los mayores señala que ha utilizado ese modelo de auriculares, pero que él no nació en los 90.
Para finalizar le piden que evaluen el aparato: «Toma mucho tiempo»,«esto es muy complicado» ó «voy a sonar muy vaga, pero hay que hacer cosas para que funcione», «necesitas cascos para escuchar música. ¿Sabes lo complicado que es eso?», son algunas de sus respuestas.
Le preguntan sobre cómo ir pasando de canción en canción. Algunos no lo saben y otros sí, pero les parece poco acertado. «No me puedo imaginar vivir en sus tiempos con esto», «me siento mal por aquellos que vivieron en los 90», «me sorprende lo mucho que ha cambiado la tecnología», «En los 80 me imagino que era: Wow, algo que puede reproducir música y llevarlo conmigo... si es que tengo un bolsillo muy grande», responden.
Los 200 dólares con los que salieron al mercado sorprende a algunos pero otros les parece razonable. «¿tanto por esto?», «¿Por qué?», preguntan. Mientras que otros lo evalúan: «Yo los pagaría, me gustan» ó «eso no es tanto.Un iPad te puede costar 700 dólares», analizan.
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