SILVIA CHEREM, Premio nacional de periodismo 2005, contesta El cuestionario Proust.

"El Cuestionario Proust”
a la manera de Beto Buzali para Silvia Cherem ( * )

¿Cuál es tu idea de “la felicidad perfecta”?
El equilibrio: tener una gozosa relación de pareja, hijos de bien capaces de amar y producir, amigos entrañables y, por supuesto, creatividad suficiente para seguir produciendo proyectos exitosos.

¿Cuál es tu mayor temor o miedo?
Durante muchos años, temía la enfermedad y la muerte, lo desconocido, me martirizaba el paso del tiempo o que un evento transformara mis días sin previo aviso.
Hoy ya tomo la vida con más filosofía: agradezco siempre la dicha del hoy y considero que la mayor fortuna es tener la capacidad de sortear los problemas, resolverlos de la mejor manera, sin convertirlos en tragedia.

¿Cuál es tu mayor extravagancia?
No me dejo inyectar ni por error. Quizá también, he sido extravagante en mi reacción ante los rateros. Las dos veces que me han puesto una pistola en la cabeza, he corrido a los ladrones a gritos. Por supuesto, con mucha suerte y una estupidez supina, lo reconozco. En una ocasión, hasta con puntapiés. Antes de estas escenitas, hubiera dicho que sólo una loca responde así y, aunque me considero cuerda, esa misma fui yo.
Recientemente en Galápagos, descubrí que mi curiosidad rebasa mis miedos. Me consideraba marinera de tierra firme, pero me animé a esnorquelear y curiosamente cuando alguien dijo que había tiburones, metí la cabeza, los tuve a 3 metros debajo de mí, y comencé a perseguirlos para observarlos bien.
Luego entonces, puedo pasar a la historia por tres excentricidades: les grito a los ladrones, persigo tiburones y le tengo pánico a las inyecciones.

¿Cuál crees que fue o sería tu mayor desdicha?
Mi mayor desdicha es la incomunicación. Sufriría demasiado si no tuviera capacidad de hablar y escuchar, si no tuviera interlocutores con quienes compartir. Necesito estar en continuo aprendizaje.

¿Cuál es tu mayor defecto?
La obsesión, no sentirme satisfecha.

¿Cuál es el defecto que no perdonas en los demás?
La deshonestidad, la maldad.

¿En qué ocasión mentiste?
Trato de no hacerlo, soy bastante transparente y, cuando alguien me interesa, siempre encuentro formas de decir lo que pienso.

¿Cuál es el ser humano que merece tu desprecio?
El que asesina y mata, el que viola y destruye, el ser sin principios ni escrúpulos que se siente dios, poseedor de la verdad o dueño del mundo.

¿Quién es el personaje histórico con quien más te identificas?
Me gustan los libertadores, los que luchan por los derechos humanos, los que no aceptan lo establecido: Gandhi o Lincoln, las contadas mujeres en el Islam que se contraponen a los imams y enfrentan el yugo, los personajes valientes que ponen en riesgo su confort.

¿Cuál sería el talento o habilidad que te gustaría tener?
Me encantaría saber cantar y poder ser una bohemia con mi guitarra al hombro.

¿Cuál consideras tu mayor éxito?
Inteligencia y perseverancia.

¿Cuándo y dónde fuiste o eres realmente feliz?
Cuando logro lo que me propongo, los pequeños escalones diarios. Esos raros momentos cuando realmente logro empatizar con mi interlocutor y siento que nos tocamos el alma.

¿Si pudieras cambiar algo de ti, qué sería?
Lo insegura que fui de niña. Afortunadamente, lo he dejado atrás.

¿En dónde te gustaría vivir?
En una ciudad de México con menos violencia y más paz.

¿Si después de muerta regresaras como personaje u objeto, ¿cuál quisieras ser?
Yo misma.

¿Si fueras un libro, cuál sería?
Un libro con hojas escritas de mi historia familiar, pero con muchas hojas limpias y en blanco para seguir haciendo camino.

¿Si fueras un animal, cuál?
Un ave que vuele mucho en libertad y tenga la capacidad de platicar.

¿Cuál es tu ocupación o entretenimiento favorito?
Leer y conversar-

¿Cuál es tu posesión más valiosa?
Mi vida. Mis fotografías. Mis libros, especialmente uno que escribí para la familia en la que me remonto a más de cien años. Los documentos de mis antepasados.

¿Cuál crees que sea el rasgo de tu personalidad que mejor te define?
Tenaz y apasionada.

¿Quiénes son tus escritores favoritos?
Auster, Amos Oz, Grossman, García Márquez, Vargas Llosa, Cortázar y Borges.

¿Quiénes son tus artistas favoritos?
En el ámbito nacional, muchos de los que he entrevistado porque su obra y su vida marcaron mis días: Leonora Carrington, Aceves Navarro, Felguérez, Rojo, Toledo, Javier Marín, Julio Galán. En el internacional, sin duda Goya.

¿Quién o quiénes son tus héroes de la vida real?
Cuando era niña tomaba como modelos a personas conocidas como figuras cabales, hoy más que una totalidad tomo rasgos de personas a mi alrededor que alcanzan sus sueños con integridad. Para mí el éxito profesional se alcanza cuando se logra sobresalir y mantener sanos los otros ámbitos de la vida: familia, amigos. Especialmente admiro a mis amigas, mujeres emprendedoras y entregadas de las que sigo aprendiendo.

¿Quién o quiénes son tus héroes de la ficción?
No sé. Quizá ese Quijote que sigue soñando y emprendiendo. Aquel que sabe ser sarcástico, reírse y tener sentido del humor. A mí me gustaría ser capaz de reírme más, de no tomarme todo tan en serio.

¿Te lamentas de algo que no hayas hecho aún en esta vida?
Viajar más, pero aún tengo vida y ganas. Diría que quiero viajar en tierra firme, porque no me tiraré de un paracaídas ni de un bongee. No soy intrépida, aunque todavía podría sorprenderme de mí misma.
De los errores cometidos, ¿cuál merece tu indulgencia?
La inocencia. Cuando era niña un mozo me manoseaba y durante muchos años, sintiéndome culpable, creí que no valía nada. Tuvieron que pasar muchos años para entender, metafóricamente sentar en el banquillo a los culpables, y perdonarme.

¿Cómo te gustaría morir?
En paz, y tras despedirme. Me gusta cerrar la página cuando concluyo, pero por supuesto no quiero sufrir ni hacer sufrir a nadie con una agonía.

¿Cómo quisieras que te recuerden las generaciones posteriores o la historia?
Periodista incisiva, escritora por la necesidad de compartir. Esposa, madre y abuela amorosa que luchó contra los fanatismos, defendió causas justas, abanderó la libertad de la mujer y cuestionó el camino trazado.

¿Cuál es tu lema o frase preferida?
Cuando el corazón está en paz, ve fiesta en cualquier aldea.
Quien no comprende una mirada, tampoco una larga explicación.

¿Cuáles serían los tres deseos que te gustaría se te concedieran?
Salud para mí, salud para mi familia, salud para mis amigos. Lo demás viene por añadidura.

Defínete con sólo seis palabras por favor.
Tenaz, apasionada, inteligente, honesta, exigente, obsesiva.

( * )

Silvia Cherem

(Ciudad de México, 1961).
Premio Nacional de Periodismo 2005 por "Yo sobreviví al tsunami"

Estudió la licenciatura en Comunicación en la Universidad Anáhuac, maestría en Sociología y Diplomado en Estudios Judaicos en la Universidad Iberoamericana.

Desde 1994, colabora en los periódicos del Grupo Reforma (Reforma, El Norte, Mural, Palabra) publicando reportajes especiales y entrevistas de largo aliento. Durante un breve período publicó también en El Economista y El Financiero. En la Revista Gatopardo, el Periódico israelí Aurora y el ABC de España asimismo se han publicado sus trabajos.

Es autora, entre muchos otros títulos, de: Una vida por la palabra. Entrevista a Sergio Ramírez (FCE, 2004); Trazos y revelaciones. Entrevistas a 10 artistas mexicanos (FCE, 2003); Al grano (Vida y visión de los fundadores de BIMBO, Khalida ed. 2008); Por la izquierda (Biografía de Miguel Ángel Granados Chapa Khalida ed. 2010).

Entre la historia y la memoria (Conaculta, 2000); y coautora del libro Imágenes de un encuentro (UNAM, 1992).

En noviembre del 2001 y en junio del 2004 fue finalista por México, del Premio Nuevo Periodismo, convocado por la fundación que preside Gabriel García Márquez.

En marzo del 2002, ganó el primer lugar en el concurso crónica de viaje de la Revista Travesías.

En junio del 2003, el Museo Beith Hatefusoth de Israel concedió una mención honorífica a “Vidas que nos dieron vida”, una biografía familiar que realizó en coautoría con su hija Raquel Shabot Cherem.

La entrevista que realizó a Octavio Paz forma parte del tomo 15 de las Obras Completas de Octavio Paz (en las ediciones de Círculo de Lectores y del Fondo de Cultura Económica).

Lo que se dice de Silvia Cherem

"El trabajo de Silvia es un buen indicador de que algo bueno está pasando en la comunicación en México."
Gilberto Marcos
(Comunicador, Monterrey, Nuevo León)

"Al leer las entrevistas de Silvia me enfrenté con el quehacer de una mujer que tiene la vocación del buen periodista. Sabe documentarse, dialogar y, es tan terca, que si tuviera un negocio de venta en abonos, la contrataría como cobradora."
Jacobo Zabludovsky
(Periodista)

"Silvia Cherem leyó los libros, vio los cuadros o las esculturas, repasó entrevistas anteriores, anotó las dudas y, mejor aún, se atreve a desafiar a los santones o a los caciques de la cultura y, a ellos, no les queda más remedio que rendirse."
Joaquín Rosas Garces
(Periodista, Xalapa, Veracruz)

"He roto el récord en número de entrevistas. Llevo cientos de miles pero la que me hizo Silvia Cherem es la número uno: la mejor."
Jose Luis Cuevas
(Artista Plástico)

"Silvia es tremenda. A mí me sacó todo, hasta lo que nunca había contado."
Juan Soriano
(Artista Plástico)

"Silvia no es una periodista convencional."
Octavio Paz
(Premio Nobel de literatura)

"Silvia Cherem me hizo preguntas que nunca antes me habían formulado. ¡Me hizo delirar!"
Paulo Coelho
(Escritor)
Fuente: www.forojudio.com